Director: James Bobin
Intérpretes: Isabela Moner, Eugenio Derbez, Eva Longoria, Michael Peña, Jeffrey Wahlberg, Danny Trejo, Temuera Morrison, Madeleine Madden, Micke Moreno, Adriana Barraza, Nicholas Coombe, Madelyn Miranda, Natasa Ristic
Sinopsis: Tras haber pasado la mayor parte de su vida explorando la jungla junto a sus padres, nada podría haber preparado a Dora para la aventura más peligrosa a la que jamás se ha enfrentado: ¡el instituto!. Exploradora hasta el final, Dora no tarda en ponerse al frente de un equipo formado por Botas (su mejor amigo, un mono), Diego, un misterioso habitante de la jungla y un desorganizado grupo de adolescentes en una aventura en la que deberán salvar a sus padres y resolver el misterio oculto tras una ciudad perdida de oro.
No es el inglés James Bobin uno de mis cineastas favoritos aun teniendo en cuenta su escasa filmografía hasta la fecha. El firmante de las actuales películas de la franquicia de los Teleñecos –LOS MUPPETS y EL TOUR DE LOS MUPPETS- o de la fallida secuela de ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS, ALICIA DETRÁS DEL ESPEJO, ha gozado de la confianza de los productores para llevar a la gran pantalla, e imprimir un carácter discretamente amable y familiar, la adaptación en versión real de la popular serie de animación emitida por Nickelodeon con el título de DORA, LA EXPLORADORA, pero como simple espectador lamento la decisión, aunque es de justicia reconocer que el desacierto parte ya desde su endeble guion confeccionado a ocho manos y nulamente novedoso o chispeante.
Me resulta casi inevitable referirme a antecedentes y referencias tanto literarias como cinematográficas que van desde LOS CINCO de Enid Blyton hasta LOS GOONIES (alguna secuencia deslizándose por toboganes de agua es evidente), e incluso EN BUSCA DEL ARCA PERDIDA en versión mucho más modesta y para plateas de edades mucho menores.
Su protagonista, la norteamericana Isabela Moner, tiene cierto encanto y desenvoltura. No carga y eso ya es mucho. Pero es que, además, es una talentosa y joven (17 años durante el rodaje) actriz que ya había despuntado con sus apreciables apariciones en SICARIO: EL DÍA DEL SOLDADO y la más que resultona FAMILIA AL INSTANTE (y como Izabella en TRANSFORMERS: EL ÚLTIMO CABALLERO, pero esta saga robótica se me atraganta) y que gracias a su origen peruano aporta el adecuado tono –no del todo preciso- étnico. Ella misma reveló que se preparó aprendiendo el idioma quechua. Y que esperaba que la película contribuyera a llevar al público al Machu Picchu y a explorar la cultura inca. Dicho con todo respeto, no creo que esta producción contribuya mucho a ello.
Lo que sí me genera simpatía y nostalgia es que la otrora musa de Sam Peckinpah (QUIERO LA CABEZA DE ALFREDO GARCÍA), la mejicana Isela, haga una fugaz aparición como mujer mayor.
También he de señalar la presencia de una comedida –casi no podía ser de otra manera- Eva Longoria como la madre de Dora. Y las colaboraciones de Danny Trejo y Benicio del Toro como Botas y el zorro Swiper respectivamente.
Tal vez el interpretativo resulte el aspecto más destacable de este insustancial y formulario producto de vocación “blockbustera”, descafeinado y de tono irrelevantemente desenfadado. Los niños o pre púberes son sus principales destinatarios, incluso pueden extraer alguna leccioncilla vital de manualillo para afrontar la vida.
Lo mejor es el número musical de los créditos finales.
José Luis Vázquez