viernes, 29 de marzo

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Estreno en Royal City

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Casi imposible ()

Director: Jonathan Levine

Intérpretes:
Seth Rogen, Charlize Theron, O'Shea Jackson Jr., Andy Serkis, June Diane Raphael, Bob Odenkirk, Alexander Skarsgård, Ravi Patel, Lisa Kudrow, Tristan D. Lalla, James Hicks, Randall Park, Aladeen Tawfeek, Nathan Morris, Wanya Morris, Shawn Stockman, Isla Dowling

Sinopsis: Cuando Fred Flarsky (Seth Rogen) se reencuentra inesperadamente con el primer amor de su vida, que ahora es una de las mujeres más influyentes del mundo, Charlotte Field (Charlize Theron), logra llamar su atención gracias a su peculiar sentido del humor y a su visión idealista del mundo y de la política. Mientras se prepara para aspirar a la presidencia del país, Charlotte contrata a Fred para que sea el encargado de escribir sus discursos. Sin embargo, Fred se va a encontrar como un pez fuera del agua en el equipo de élite de Charlotte, y tampoco logra integrarse en su vida, repleta de toda clase de lujos. Sin embargo, las chispas saltan entre ellos y su química irrefrenable les conducirá a un romance alrededor del mundo y una serie de inesperados y peligrosos incidentes. (FILMAFFINITY)

Crítica de José Luis Vázquez

Valoración: 4 estrellas

Atípica comedia romántica, políticamente incorrecta, mal hablada en ocasiones (algo buscado, claro), un punto vulgar, algo gamberra y, definitivamente refrescante y meritoria.

El mero hecho de ofrecer un romance tan improbable en la vida real como el aquí propuesto, ya la hace simpática de partida, lo cual no es óbice para que ello por sí mismo sea suficiente para su elogio.

No deja de resultar sintomático que un proyecto de estas características haya sido apoyado en la producción por su inquieta –artísticamente- pareja protagonista, unos divertidos y chispeantes Charlize Theron (en su caso, físicamente esplendorosa) y Seth Rogen, uno de los cómicos que más se han saltado los convencionalismos de este tipo de historias en los últimos años. Aquí vuelve a aportar a su catálogo personal más de un numerito, estoy pensando en este momento en uno en concreto escatológico digno de ALGO PASA CON MARY.

Conviene tener en cuenta que no son los que vivimos tiempos precisamente sofisticados, cursilones y melifluos; de ahí que el Séptimo Arte se haga inevitablemente eco de ello, pues utilice el género o el registro que sea, no deja de ser siempre notario de la sociedad del momento que le toca vivir, de sus usos, modos y costumbres, gusten más o menos a título personal. Y si repasan su historia, algunos de sus títulos más granados, desde el origen a finales del siglo XIX con los Lumiére, comprobarán fácilmente lo que acabo de señalar.

Concretamente CASI IMPOSIBLE se centra en la relación sentimental de una Secretaria de Estado norteamericana, aspirante a Presidenta, y un periodista contestatario, en el que supone su reencuentro tras haber sido la primera en su adolescencia niñera del segundo, al que le lleva tres años.

A partir de aquí surge el lío, aunque un prólogo acerca del auge del neo nazismo en los USA, ya pone en situación.

Mi consejo es que para su mayor disfrute la contemplen con manga ancha, quiero decir, olviden los hitos del género en su versión más elegante. Aunque la aquí comentada, si reparan atentamente lo es. Esto es así en el lujo desplegado por los diferentes escenarios elegidos, en la magnífica y heterogénea selección musical o en una clásica química, casi de alquimia, entre la dupla anteriormente mencionada. Y qué caray, me parece estupendo (a la inversa, sería exactamente igual) que una señora rutilante, inteligente y tremenda como Theron (nada que envidiar a las reinas del género, a una Carole Lombard o la recientemente desaparecida Doris Day, entre otras, o incluso la Grace Kelly hitchcockiana) se fije en un tipo que supuestamente no es una lumbrera… o sí.

La diversión está garantizada, no de grandes carcajadas, pero sí con una casi permanente sonrisa. El contraste de personalidades antitéticas funciona y los característicos contribuyen a insuflar de vida a este inicial disparate que acaba trocándose en una golfa, incluso elegante, mordaz y reconstituyente comedia, que pasa con inaudita rapidez, síntoma inequívoco de su dinamismo y agilidad. Y, aviso, como ha destacado algún colega (Javier Ocaña entre ellos), un ataque en toda regla a la sociedad biempensante. Pero entiendo, y no solo por esto, que pueda repeler a algunos.

José Luis Vázquez