viernes, 19 de abril
viernes, 19 de abril
Director: Frank Borzage
Intérpretes: Margaret Sullavan, James Stewart, Robert Young, Frank Morgan, Robert Stack, Bonita Granville, Irene Rich, William T. Orr, Maria Ouspenskaya, Gene Reynolds, Russell Hicks, William Edmunds, Esther Dale, Dan Dailey, Granville Bates, Ward Bond
Sinopsis: Victor Roth es un estimado profesor universitario de origen judío que vive felizmente con su esposa y los cuatro hijos de ésta en un pequeño pueblo del sur de los Alpes alemanes. Pero, cuando Hitler llega al poder (1933), los dos hijos varones adultos, la hija (Margaret Sullavan), su prometido (Robert Young), y el mejor amigo de la familia (James Stewart) comienzan a separarse, puesto que unos apoyan al nacionalsocialismo y otros no. Pronto sus vidas cambiarán. (FILMAFFINITY)
El cineasta estadounidense (de Salt Lake City, cuna de los mormones) de las décadas de los 20, 30, 40 e incluso 50 del pasado siglo, Frank Borzage, ha sido y es uno de los más románticos, sensibles y exquisitos que haya dado jamás la historia.
Hoy en día un tanto olvidado, o relegado, yo no puedo dejar de estarle infinitamente agradecido por un considerable número de joyas suyas –jamás hizo nada mediocre- con las que me provocó felicidad, como EL ÁNGEL DE LA CALLE, EL SÉPTIMO CIELO (en su primera y sublime versión muda), TORRENTES HUMANOS, ¿Y AHORA, QUÉ?, FUEROS HUMANOS, SECRETOS, DESEO, CENA DE MEDIANOCHE (una de las cumbres del género amoroso), MANIQUÍ, LA HORA RADIANTE, VIDAS HEROICAS, TRES CAMARADAS, BIG CITY, ESTRELLAS DICHOSAS, PASADO MAÑANA, LA HORA RADIANTE, EXTRAÑO CARGAMENTO, LA GRAN PASIÓN, LA PRIMERA DAMA, MOONRISE, TRES DÍAS DE AMOR Y FE, EL GRAN PESCADOR, MUÑECA DE PORCELANA y otro buen puñado más. La mayor parte descubiertas gracias a esas impagables programaciones cinematográficas de hace décadas de Televisión Española. Las otras, gracias al impagable mercado del dvd.
THE MORTAL STORM, o TORMENTA MORTAL, nunca estrenada en las salas españolas por motivos obvios para quienes la conozcan o la descubran por primera vez, supone un alegato anti totalitarista, anti nazi (uno de los primeros e inmemorables surgidos de los estudios hollywodenses) y pro libertad de un alcance delicada y sugerentemente fulminante. Su fecha de producción, 1940, la “delata” para extraordinariamente bien.
De hecho, constituye la tercera entrega de la creo que no buscada, pero denominada por algunos como su “Trilogía Alemana”, la cual vino precedida por dos títulos a idéntica altura magistral, ¿Y AHORA, QUÉ? de 1934 y TRES CAMARADAS de 1938.
Su historia perfectamente podría ser extrapolable a nuestra recién finalizada Guerra Civil, a aquello tan trágico de cómo miembros de una misma familia o entorno acabarían militando y enfrentándose en trincheras –y ya no me refiero a las meramente bélicas- opuestas.
Pero Borzage, como era habitual en su cine, aun reflejando miserias físicas o materiales, volvería a sublimar todo esto, sin dejarse llevar en ningún momento por la simpleza, el sectarismo o la vulgaridad. Ofrece un sutil y apasionado canto en pro de la tolerancia para con los demás repleto de toneladas de emoción, a la par que lleva a cabo una enardecedora proclama contra la sinrazón. Y el amor y la dignidad serían de nuevo focos principales y sobre los que pivotaría la mayor parte de su filmografía.
Además, elude el panfleto, la soflama gratuita o el ejercicio intelectualoide en aras a esas emociones anteriormente reseñadas y aquí en su estado más líquido y puro. Y lleva a cabo una descripción detallada y precisa, aunque fuera en plató (o tal vez por ello) de los tiempos pre Segunda Guerra Mundial que se estaban viviendo, poniendo sobre el tapete terribles, dolorosos, trágicos dilemas éticos y de conducta.
Victor Roth es un prestigioso profesor universitario de origen judío que vive plácidamente con su esposa y cuatro hijos en un pequeño pueblo de los Alpes germanos. Tras la subida de Hitler al poder las grietas entre los suyos y allegados en forma de parejas de alguno de sus vástagos, no se harán esperar. Y no cuento más… para que lo descubran ustedes.
Con esta premisa tan sugerente, Borzage cumple con creces, diría que las rebasa, tan prometedoras expectativas dramáticas. Desde luego no esperen complacencias ni finales gazmoños precisamente.
Uno de los aspectos que resulta más impresionantes son las interpretaciones de cada uno de los componentes del elenco completo, desde un joven James Stewart hasta los posteriormente populares Robert Young (la entrañable serie de los albores de los 70 MARCUS WELBY, DOCTOR EN MEDICINA), Robert Stack (el primer y mítico Eliot Ness televisivo), la maravillosa Margaret Sullavan (esposa durante un año de Henry Fonda, solo alcanzaría 50 primaveras por decisión propia, recuerden trabajos suyos tan inolvidables como EL BAZAR DE LAS SORPRESAS, EL ÁNGEL NEGRO o en los dos títulos anteriormente citados de esta trilogía), la formidable característica Bonita Granville o el gran Frank Morgan, el genuino MAGO DE OZ.
Maravillosa secuencia final con ese recorrido por estancias del personaje de Stack. Y, lógicamente, nada más contaré. Entre otros muchísimos momentos memorables, destacar el del homenaje de la clase al profesor. Y así, decenas más, pues está portentosamente filmada, mediante todo tipo de recursos y movimientos con la cámara tremendamente meritorios para la época… pero no me extenderé mucho más en ello para no chafarles el descubrimiento de los mismos.
Y por favor, quede claro que esto no va de vetusto y rancio realismo soviético… esto, felizmente, va de CINE, del americano más clásico, del mejor e insuperable.
José Luis Vázquez
