¡Hola! A veces la gente se enamora sin conocerse en persona, rápidamente. O bien, charlando una o dos veces.  O huye de esa posibilidad que ve venir, pero que rechaza por tener comprometido su futuro. Yo sobre esto, no opino, o por mejor decir, no manifiesto mi opinión. Solo escribo poemas y ya está. ¡Besos!

ENTRE POETAS

Fue en el primer verso

de aquel poema tan largo,

donde caímos en la cuenta,

de lo difícil que sería no amarnos.

Y se ha cumplido aquel oráculo.

Latiendo en las palabras

con un ritmo pausado,

vibro de estrofa en estrofa

mientras nos ocultamos

entre el miedo y las sombras.

Florecieron los sentimientos

entre arañazos al alma,

como un río que baja salvaje,

mientras te bañas en un remanso.

¿En que habrían de terminar

dos fuegos prendidos cada noche

si no es en un incendio

de proporciones bíblicas?

Habría que regresar

aunque sea lentamente,

desandar desde el último verso

hasta el principio del poema.

Y construirlo de otro modo,

sin lluvia, ni viento, sin bruma y sin cenizas.

Ahora, es una realidad de cristal,

lo que antes fue un sueño de ojos abiertos.

Habría que reescribir con más cuidado,

y aceptar que todo es un juego

de nuestras manos mudas.

Podríamos vernos en otros espejismos,

pero debemos despedirnos con el dolor del alba.